viernes, noviembre 09, 2007

La solidaridad con el zapatismo

Después fuimos descubriendo que la supuesta solidaridad con el zapatismo, no había sido, para ellas y ellos, nada más que una inversión.

Los hoy funcionarios reparten limosnas para lavarse la cara, guardan o exhiben sus fotos con zapatistas según vayan los vientos, se felicitan mutuamente por su prudente madurez, y engordan la cartera con billetes y tarjetas de crédito, y su corazón con coartadas que maquillen sus traiciones y claudicaciones.

Esto pasó y pasa no sólo en México, también en Europa. Colectivos de solidaridad que entonces tendieron puentes, hoy nos atacan, guardan un silencio cómplice o se distancian con un oportunismo que tiene como marcapasos el rating en los medios de comunicación.

Y pretenden que, en pago a los “favores recibidos” (así lo dicen), el EZLN debe apoyar sus posiciones sobre la justa lucha del pueblo Vasco, sus políticas de apoyo vergonzante al intervencionismo norteamericano y europeo, sus suspiros por las monarquías que manchan el viejo continente, su quehacer que de tan bien portado y neutro, apesta. Como no lo hacemos, entonces se retiran o se mudan a lo que esté de moda, eso sí, previo deslinde público… o privado.

En estos y otros suelos, los usureros de la solidaridad nos reclaman una autocrítica, nos exigen pedir perdón por no obedecerlos, por no seguirlos, por no someternos.

Nos equivocamos entonces. Ahora sabemos que la solidaridad que no se dan sin condiciones, sin esperar nada a cambio, no es más que otra forma de usura, la del que pretende sacar ganancia del dolor y la lucha ajenos.

Todo esto también viene al caso porque éste es un foro de solidaridad con las comunidades indígenas zapatistas.

Y yo sólo vine para avisarles que, aquellas personas, grupos, colectivos, organizaciones que piensen practicar la usura con sus apoyos y solidaridad para con nuestros pueblos, sepan que no tendrán retribución alguna. Les decimos que se vean en el espejo que arriba simula ser de izquierda, que asistan a sus cafés, a sus convivios, a sus mesas de redacción, a sus consejos nacionales, a sus oficinas gubernamentales. Escucharán, con sorprendente unanimidad, que el zapatismo ya pasó de moda, cometió muchos errores, no es realista, es sectario, es radical, es naco,… es consecuente.

Que no me malinterprete, no es que seamos malos deudores o que no queramos pagar.

Se trata simplemente de una confusión.

Porque en esto largo batallar, los pueblos indios todos, no sólo los zapatistas, somos los acreedores.

Así es desde que el mundo empezó su andar. Así fue hace 200 años. Así fue hace un siglo.

Así será cuando el calendario de abajo vuelva a alcanzarnos y a presentarle al arriba la interminable cuenta de debes que abajo y a la izquierda se acumulan.

Porque, hay que decirlo, tal vez lo que el Che mencionó como visto en lontananza no era sino el lugar donde la libertad es punto de llegada y de un nuevo paso: el de ser mejores

Vale (aunque sea un vale para la gasolina). Salud y que, en las sumas y restas, gane el mañana.

Subcomandante Marcos. Octubre 2007